Muchas consultas en este momento se dirigen a este aspecto. Los niños por su curiosidad normal y sana comienzan a preguntar sobre su papá, por qué no tienen papá o incluso que les gustaría tener uno.
En la medida en que la madre y la familia tengan elaborado este aspecto y no sea algo vergonzoso, oculto o difícil, hará que se pueda hablar con el hijo de la forma más natural posible. Claro que hay materiales, cuentos para acompañar en el proceso. Pero el aspecto fundamental es mi vivencia interna como madre.
A veces las madres piensan que les gustaría darle «todo» a sus hijos, y que es una pena no poder darles un padre. Sin embargo, eso es imaginar que la posibilidad de tenerlo todo en la vida es posible. A todos nos falta algo, a las familias tradicionales y a las monoparentales. Lo que sí es cierto, es que las monoparentales se enfrentan con el reto de tener que ocupar varios lugares (emocional y poner límites) siendo una misma persona.